Del viernes 17 al lunes 20 de junio, los argentinos tendrán un respiro de sus actividades habituales. Un nuevo fin de semana extra-large se avecina. Poco tiempo para un viaje largo, pero mucho tiempo para quedarse en casa haciendo nada. Así que en esta nota de Turismo Digital, te presentamos algunas opciones rápidas para organizar tu salida en familia para este viernes.

 

Nuestra bloguera de viaje, Karina Nemer, nos viene contando acerca de algunos parajes de la provincia de Buenos Aires, hacia donde se puede llegar en un par de horas desde la Capital, y disfrutar de algunas de sus particularidades.
La ciudad de Navarro es una de ellas. Navarro no es solo laguna. Es pueblo campero, lechero y bonaerense. Está ubicada a 125 kilómetros de Buenos Aires y se llega por autopista Ezeiza-Cañuelas y ruta provincial 40.
En esta ciudad se pueden apreciar varias estancias convertidas en restaurantes con platos exquisitos, en los que sobresalen las entradas de escabeches, empanadas y picadas, como previa de los ricos asados que se hacen en cualquiera de estas pulperías.
Pero no solo se trata de comer en Navarro, sino de recorrer un pueblo con una riquísima pero, tal vez, no tan conocida historia, a través de sus antiguas edificaciones que esconden alguna anécdota que forma parte del andar histórico de nuestro país.

Entrada al pueblo de Navarro

Recorriendo algunos suplementos turísticos de los diarios nacionales, nos encontramos con un interesante informe de El Cronista, donde destaca 4 ciudades donde pasar el fin de semana largo. Una es Carlos Keen, un pueblo ubicado en el municipio de Luján, a unos 75 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires. Debe su nombre a un abogado y periodista nacido en Las Flores en 1840, quien ocupó el grado de Teniente Coronel en la Guerra de la Triple Alianza.
Carlos Keen es un lugar tranquilo para descansar, pero también un importante polo gastronómico en el que se destacan los restaurantes de campo. Por supuesto, las parrilladas, el asador y todo menú a base de carne es el centro de atracción de las decenas de lugares que hay para elegir a la hora de comer.
El Granero de la Estación, la Capilla San Carlos de Borromeo y el Museo Rural, son lugares que no se debería dejar de conocer en su paso por Keen.

Estación Carlos Keen

Villa Lía es otro pueblo mencionado por Karina. Ubicado a 127 kilómetros de CABA, en el partido de San Antonio de Areco. También cuenta con un museo y un centro cultural de visita obligada y almacenes en los que también se puede degustar de ricos tragos.
Esos almacenes fueron furor en algún tiempo y hoy solo quedan dos: el Almacén de Pascual y el Almacén de Cancedo, que se convirtió en un autoservicio, aunque su fachada se mantiene tal cual era en su época de apogeo.
Una visita que se puede hacer en Villa Lía es el Museo de los Rostros de La Pampa que ofrece visitas guiadas para conocer más sobre la historia de los inmigrantes que llegaron a estas tierras. Allí hay una sala campestre, con muestras de varias herramientas y maquinarias de tracción a sangre, donde se muestra desde la preparación del suelo hasta la molienda del cereal en la época de la Revolución de las Pampas (1870 a 1930) y que llevó a la Argentina a ser 4ta potencia mundial.

Estación de Villa Lía

Por último, Suipacha, cuyo principal atractivo es la denominada Ruta Del Queso, que nos exime de mayores explicaciones. Está ubicada a unos 126 kilómetros de la Capital y ofrece una muestra de la gran tradición de la zona: la industria lechera.
A lo largo de la Ruta Nacional 5 se pueden visitar varios centros de producción: la histórica La Suipachense; las fábricas de quesos Cabaña Piedras Blancas y Fermier; el criadero de cerdos y jabalíes La Escuadra; la boutique de productos artesanales Quesos de Suipacha y la plantación de arándanos Il Mirtilo.
Se puede hacer una visita guiada grupal, pero lo más recomendable es hacerlo en forma independiente para poder recorrer todas las fábricas durante el tiempo que se desee.

La Ruta de los Quesos, una de las principales atracciones suipachenses

En todos los casos, estos pueblos cuentan con alojamientos y posadas aptas para la familia, donde pasar la noche.